Con la llegada de las bajas temperaturas y los temidos aumentos en las facturas de luz y gas, es necesario recurrir a ingeniosos trucos caseros para mantener nuestro hogar cálido sin gastar de más. Las estufas y aires acondicionados, en tiempos de austeridad, deben ser utilizados con precaución para evitar gastos excesivos.
Aunque todavía estemos transitando el otoño, ya comienza a ser necesario el preguntarse cómo podemos mantener la casa caliente sin hacer un uso excesivo de la calefacción cuando las bajas temperaturas lleguen para quedarse durante unos meses.
Y es que, contrario a la creencia popular, es posible lograr que nuestro hogar sea más cálido sin necesidad de encender la calefacción. Para lograrlo, presentamos algunos consejos prácticos para mantener una temperatura agradable antes de la llegada definitiva del invierno.
Efectivos y economizadores: trucos caseros para mantener cálido el hogar
- Cubrir las paredes frías: independientemente de la orientación de tu hogar, es posible evitar que el frío se cuele colocando estanterías, bibliotecas o decoraciones en las paredes más frías. Si estas paredes tienen ventanas, instalar cortinas que las cubran por completo ayudarán a bloquear el frío exterior.
- Aislar el suelo: esta es la clave para conservar el calor en toda la casa. Es necesario revisar si hay huecos o grietas para evitar filtraciones de frío. Utilizar alfombras, especialmente en invierno, para mantener el calor, es una buena opción que incluso puede combinar con la combinación del hogar.
- Cubrir las ventanas: es posible evitar que el frío entre por las ventanas cubriéndolas con cortinas de materiales gruesos como polares o plásticos. Si la puerta se abre y cierra con frecuencia, colocar una cortina gruesa evitará la entrada de aire frío.
- No secar la ropa cerca de las fuentes de calor: aunque pueda resultar tentador, evita tender la ropa cerca de las estufas para que se seque más rápido. La ropa húmeda absorbe el aire caliente y no permite que se distribuya por toda la casa, manteniéndola fría a pesar de la calefacción.
Estos trucos caseros son simples pero efectivos para mantener el hogar cálido y acogedor durante los meses de frío, al mismo tiempo que ayudan a reducir el consumo de energía y ahorrar en las facturas. Con un poco de previsión y creatividad, es posible disfrutar de un ambiente confortable sin preocuparte por el impacto para el bolsillo.
