Desde que Luis Miguel anunció sus conciertos en Buenos Aires, los fans esperaban este momento: el de la venta de entradas. Y como era de esperar para uno de los artistas favoritos del público argentino, los primeros tickets volaron en cuestión de minutos, dejando a las claras las ganas que hay en estas tierras para ver al mexicano luego de cuatro años.
Luismi tocará el próximo 3, 4 y 6 de agosto en el Movistar Arena y los fanáticos montaron guardia virtual para asegurarse su lugar en el recinto de Villa Crespo. En menos de media hora se agotó la preventa de entradas exclusivas para clientes de un banco. De inmediato, comenzó la venta general para las tres fechas, mientras las redes sociales coincidían las alegrías de quienes se habían asegurado su lugar con la frustración de aquellos que se habían quedado con las ganas.
Los tickets volaron en menos de dos horas, y desde la producción anunciaron tres fechas más el 8, 9 y 12 de agosto. Las entradas se adquieren en la página oficial del estadio y el valor oscila entre los 22 mil y los 75.000 pesos, en ambos casos sin contar el costo adicional por el servicio.
Luego de su parada en Buenos Aires, el tour de El Sol de México seguirá en Santiago de Chile para después continuar por Estados Unidos y atravesar diferentes países y culturas. Hasta el momento, tiene pautados más de 40 recitales y el cierre de esta etapa está programado para el 17 de diciembre en México, en la ciudad de Guadalajara.
Luis Miguel no toca en el país desde 2019, cuando ofreció una serie de conciertos en el marco de su gira México por siempre, que significó su regreso a los escenarios mientras se daba a conocer la serie sobre su vida protagonizada por Diego Boneta. El músico actuó el 1° y 2 de marzo, y en cada concierto reunió a más de 40 mil personas en el Campo Argentino de Polo. Y como ocurre en cada una de sus visitas, también se ocupó de recorrer y disfrutar de algunos clásicos de Buenos Aires.
El músico anunció este tour el pasado 19 de abril, día de su cumpleaños número 53, que celebró en Madrid, junto a su novia Paloma Cuevas. Se trató de una fiesta sorpresa organizada por la diseñadora española, en la que las cámaras de la agencia Europa Press captaron algunos detalles del festejo.
Al sitio acudieron amigos selectos de la pareja, tal el caso del cantante colombiano Sebastián Yatra, quien llamó la atención con su llamativo look de camisa naranja, y el futbolista Raúl González Blanco, leyenda del Real Madrid, junto a su novia Mamen Sanz. Junto a ellos se retiró el homenajeado, tras varias horas de festejo en el departamento ubicado en el centro de Madrid.
Reacios a hablar de su vida privada, Luis Miguel y Paloma Cuevas confirmaron su relación de una manera muy particular: simplemente, dejaron de ocultarse y eligieron vivir su amor sin tener que dar ningún tipo de explicación. Primero, habían sido vistos en un exclusivo restaurante de Nueva York, disfrutando de una velada y muy cerca, haciéndose caricias.
A principios de abril, la pareja fue fotografiada en el aeropuerto de Madrid, a punto de tomar un vuelo privado hacia lo que fueron sus primeras vacaciones como una familia ensamblada: se sumaron Paloma, de 14, y Bianca, de 11, las hijas que la empresaria española tuvo con su exmarido, el torero Enrique Ponce.
