El mercado de la refrigeración industrial está impulsado principalmente por varios factores, como el crecimiento de las industrias farmacéutica y de alimentos y bebidas, el aumento de las industrias de la cadena de frío y el aumento de la industrialización en las economías en desarrollo. En estas industrias, la refrigeración industrial se utiliza para mantener un entorno propicio para el almacenamiento y transporte de productos perecederos, así como de productos químicos volátiles. Además, varias industrias utilizan sistemas de refrigeración como enfriadores, compresores y otros componentes para mantener frías las máquinas tanto en las industrias como en los centros de datos.
El caso de Mayekawa
Una de las empresas que más ha crecido es, Mayekawa, una compañía de origen japonés que no ha parado de expandirse a nivel mundial con el objetivo de convertirse en la mejor opción para aquellas industrias que necesitan sistemas de refrigeración. Su secreto ha sido la calidad de sus productos, la excelente atención y servicio posventa. Bajo la marca MYCOM, el compresor de Mayekawa son utilizados alrededor del mundo en los mercados de la refrigeración y congelación industrial, bombas de calor y gas.
¿Qué es la refrigeración industrial?
La refrigeración industrial es uno de los aspectos más importantes de la conservación de los productos de la huerta, ya que es la encargada de mantener la cadena de frío desde que se recogen las frutas, verduras y hortalizas, hasta que llegan a las tiendas y supermercados.
Estos sistemas de refrigeración consisten en entornos cerrados donde se mantiene una temperatura inferior distinta a la exterior, y también se puede regular la humedad del ambiente. Esta diferencia de temperatura es bastante significativa y está diseñada para proteger el contenido, evitando así que se estropee y manteniéndolo en las condiciones ambientales deseadas.
Este tipo de refrigeración industrial suele consistir en cámaras de congelación de gran tamaño donde se puede almacenar todo tipo de alimentos como frutas, verduras, frutos secos, carne o pescado, pero también se utilizan para conservar otros productos que necesitan condiciones ambientales específicas como productos químicos y medicamentos.
El crecimiento en el comercio mundial
Además, el comercio mundial está aumentando a un ritmo rápido, lo que se espera que aumente la demanda de industrias de cadena de frío. Según la Organización Mundial del Comercio, el valor monetario general del comercio internacional de bienes físicos alcanzó un valor de 25,3 billones de dólares en el año 2022. Las proyecciones indican una expansión gradual del 1,7% en 2023, que se espera que crezca sustancialmente un 3,2% en 2024. Una parte importante de este extenso comercio incluye productos perecederos que requieren condiciones de temperatura específicas para mantener su calidad y evitar su deterioro. Estos productos suelen proceder de sectores como el farmacéutico, alimentos y bebidas tanto congelados como no congelados, productos químicos y otras industrias.
Además de esto, la demanda de alimentos y bebidas congelados y no congelados, como helados, postres, carnes, aves, lácteos y otros, también está aumentando en todo el mundo. Según el Instituto Americano de Alimentos Congelados (AFFI), las ventas minoristas de alimentos congelados aumentaron significativamente un 23% en 2021 en comparación con 2019. Además, también se puede observar un desarrollo similar en Europa. Por ejemplo, según los datos proporcionados por Freshfel Europe's Consumption Monitor, la Unión Europea fue testigo de un notable aumento en el consumo de frutas y verduras en 2021.
El consumo diario per cápita de estos productos de frutas y verduras alcanzó los 364,58 gramos, lo que supone un crecimiento sustancial del 2,2 % respecto al año anterior, es decir, 2020. Además, esta cifra supera en un 1,27% el consumo medio de la Unión Europea de los últimos cinco años. Esta tendencia ascendente indica una creciente preferencia y conciencia de los beneficios para la salud asociados con el consumo de frutas y verduras entre la población de la Unión Europea. Así, debido al crecimiento del comercio y el consumo de productos perecederos, varias empresas involucradas en el suministro de logística de cadena de frío están ampliando sus capacidades. Estas instalaciones requieren significativamente de un sistema de refrigeración industrial; por lo tanto, muchas empresas del mercado de la refrigeración han lanzado sus productos de refrigeración para la industria de la cadena de frío.
Por otro lado, según la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU., se estima que una tienda minorista de alimentos típica pierde un 25% de refrigerante anualmente, lo que genera un impacto negativo en el medio ambiente. Esto enfatiza la importancia de regular el uso de refrigerantes para proteger el planeta. Por lo tanto, los gobiernos de todo el mundo han implementado regulaciones estrictas sobre una amplia gama de refrigerantes que tienen efectos adversos en el medio ambiente y se espera que limiten el crecimiento del mercado. Por ejemplo, el gobierno de EE. UU. también ha planeado prohibir el uso de refrigerantes con alto PCA, incluidos R134a, R410A y R407C, en nuevos enfriadores en EE. UU. a partir del 1 de enero de 2024.
Además, el desarrollo tecnológico es una importante oportunidad de mercado de refrigeración industrial que se espera que brinde oportunidades lucrativas para los actores clave del mercado. Por ejemplo, también se están incorporando a la refrigeración industrial tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA), el Internet de las Cosas (IoT), la conectividad en la nube y otras. Por ejemplo, Danfoss iMCHE permite que diferentes circuitos utilicen el área de transferencia de calor de una sola bobina, lo que eventualmente aumenta la eficiencia del sistema en más de un 20 %. Esto también ayuda a maximizar la eficiencia de la transferencia de calor y reducir la carga de refrigerante en un diseño compacto y liviano. Además, también ofrece la solución de gestión adaptativa de líquidos de CO2 (CALM) para su categoría de refrigeración.
