La canasta básica total (CBT), por la que el INDEC mide el umbral de la pobreza, aumentó en septiembre 7,1%, por lo que, para no ser considerada pobre, una familia de cuatro integrantes (dos adultos y dos menores) necesitó $128.214. En tanto, la canasta básica alimentaria (CBA), que establece la línea de la indigencia, marcó que esa misma familia requiere de $56.732 para cubrir sus necesidades básicas para subsistir.
La CBT que comprende alimentos y otros bienes y servicios básicos, como la vivienda, ascendió a $$41.493 mensuales por persona en septiembre, mientras la línea de indigencia -que incluye la cobertura alimenticia imprescindible- se ubicó en $18.360.
Las variaciones se ubicaron por encima del índice de inflación, que en septiembre llegó a 6,2%, informó el viernes INDEC. Con ese dato, la escalada de precios suma 83% en los últimos 12 meses, la mayor cifra desde fines de 1991. En tanto, en los primeros nueve meses de 2022, el acumulado llega a 66,1% y las previsiones la ubica por encima de 100% para el cierre del año.
Con respecto a los ingresos familiares necesarios para superar la línea de pobreza, el INDEC señaló:
- Una persona necesitó de $41.493 para no caer bajo la pobreza.
- Un hogar de tres personas requirió $102.073 en septiembre para no ser pobre.
- Una familia de cuatro integrantes necesitó un ingreso mínimo de $128.214.
- Para cinco integrantes, el hogar debió sumar ingresos por al menos $134.853.
Por su parte, los ingresos familiares requeridos para superar la línea indigencia fueron:
- Una persona requirió de $18.360 para no ser indigente.
- De $45.165 para una familia de tres miembros.
- Ascendieron a $56.732 en los hogares de cuatro integrantes.
- Llegaron a $59.669 si conviven cinco personas.