El jefe de ministros, Juan Manzur, convocó para este miércoles a una nueva reunión de Gabinete. A un mes de la llegada de Sergio Massa al Palacio de Hacienda, concentrará las decisiones de gestión, pero el componente político girará en torno del pedido de condena a Cristina Kirchner y la movilización en las calles que recuperó el kirchnerismo.
El último encuentro entre los ministros fue hace 20 días y lo encabezó el presidente Alberto Fernández, por lo que no se descarta que el mandatario sea nuevamente de la partida. Fue la primera vez que Massa formó parte y concentró la atención ante los lineamientos de política económica que comenzó a informar al resto de los miembros del Gabinete nacional.
La agenda económica
Si bien condenó el pedido de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos que pidieron los fiscales de la causa Vialidad para la Vicepresidenta, Massa se enfoca en la agenda económica. Busca que los cimbronazos de la política no pongan en riesgo la economía del país.
En la reunión, se espera que el tigrense hable sobre los avances en su primer mes de gestión y que siga marcando el camino hacia lo que viene. Ya en el encuentro anterior habló de los techos y recortes presupuestarios que alcanzarán a distintas áreas y luego fue avanzando con cada una.
Por un lado, el titular del Palacio de Hacienda podrá mostrar una cierta tranquilidad que llevó a los mercados, con los dólares financieros, el blue y el riesgo país sin grandes sobresaltos, y los oficiales en un camino de escalada gradual.
Por otro, enfrentará desafíos como su viaje a Estados Unidos, donde se reunirá formalmente con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y la llegada del dato de inflación de agosto, sobre el que siguieron presionando con fuerza los precios de los alimentos. También preocupa cómo impactará para septiembre la quita de subsidios a los servicios públicos.
Clima social efervescente
En los últimos días, el Frente de Todos (FdT) logró recuperar la épica kirchnerista de años atrás. El pedido de condena de Cristina Kirchner encolumnó a todos y logró lo que hasta ahora parecía imposible.
En bloque, las diferentes fuerzas políticas que forman parte del FdT salieron a defender a la Vicepresidenta y la militancia recuperó las calles. Aunque acompañó a en la vigilia, Patria Grande, el partido político que lidera Juan Grabois, dejará el bloque de Diputados del Frente de Todos hasta que no se anuncie un paquete de alivio para los sectores más desprotegidos.
Hasta ahora, además de esperanzarse para 2023, con los enfrentamientos con las fuerzas de Seguridad porteña del fin de semana, el kirchnerismo recuperó un contrapunto y logró sacar a la luz las disputas internas del Pro.
En Juntos por el Cambio miraban tranquilos cómo la pelea entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner había generado una profunda crisis en la coalición gobernante y habían logrado aplacar la propia, pero el manejo de la calle por parte de Horacio Rodríguez Larreta volvió a dejar en evidencia las diferencias dentro de la oposición. El Pro intentó saldarlas este martes en un almuerzo, pero quedaron más dudas que certezas.
En el medio, las organizaciones sociales no alineadas con el oficialismo volverán a medir fuerzas la semana próxima con movilizaciones en el centro porteño mientras se discute la necesidad de ampliar los recursos para asignaciones sociales.
