La inteligencia británica reveló que Moscú está desplegando unidades especiales en el campo de batalla en Ucrania para disparar a los soldados que tratan de desertar el ejército ruso.
La amenaza se conoce en medio de noticias crecientes que hablan de rebeliones de movilizados que se niegan a combatir en el frente mientras se viven horas cruciales para la batalla final de Jersón, uno de los territorios anexados por el Kremlin tras un polémico referéndum rechazado por Kiev y la OTAN.
Qué dice el informe de inteligencia británica sobre las deserciones en el ejército ruso
El informe de la Inteligencia británica dijo que el Kremlin habría desplegado “tropas de barrera” para contener a los soldados que desertan. “La táctica de disparar a los desertores probablemente atestigua la baja moral y la indisciplina de las fuerzas rusas”, señaló el reporte.
Según el documento, los generales rusos abrieron la posibilidad de disparar contra quienes se retiren de la batalla “después de haberles advertido”.
En tanto, según EFE, soldados de la 155ª Brigada de Infantería de Marina se quejaron ante el gobernador de la región rusa de Primorie por las 300 bajas en sus filas causadas en una ofensiva contra la localidad de Pavlika, en la región separatista del Donetsk.
El sitio ruso independiente Meduza precisó que las víctimas se produjeron en cuatro días de intensos combates. La brigada perdió además la mitad de su equipo militar después de quedar rodeados por las tropas ucranianas.
La protesta de los soldados de Primorie no es la única. El lunes medios rusos independientes informaron que 21 movilizados se negaron a luchar y fueron recluidos en un sótano en la aldea de Zavitne Bazhannya, en la provincia de Donetsk, según una carta de las esposas y madres citada por EFE.
Este martes se conoció un video grabado por ocho familiares de movilizados cerca de la oficina de registro y alistamiento militar en Pavlovsk, en la región rusa de Vorónezh, para exigir la vuelta de sus familiares del frente.
La madre de uno de los movilizados, Marina Kretova, dijo que su hijo solo fue llevado al campo de tiro una vez durante el entrenamiento de dos semanas.
Meduza se hizo eco además de videos grabados por movilizados en Tatarstán que exigieron a sus superiores mejorar sus condiciones al quejarse de la falta de agua, leña para calentarse y de la entrega de armas obsoletas.
Entretanto, en la república rusa de Chuvashia, más de cien movilizados se negaron a principios de mes a luchar en Ucrania por no haber recibido aún ningún pago de los 195.000 rublos mensuales (US$3184) prometidos, según Gugalu.net.
Ante las quejas, el Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que adelantó este martes el pago de los salarios del mes pasado.
Inminente batalla de Jersón
En tanto, es inminente el comienzo de la batalla de Jersón. Las autoridades prorrusas reconocieron la superioridad numérica de las fuerzas de Kiev en esa provincia del sur del país.
”No vemos ningún tipo de ofensiva masiva” en Jersón por parte de Ucrania, destacó el vicegobernador instalado por Rusia en esta región anexada, Kiril Stremoúsov. No obstante, dijo que hay “miles” de soldados ucranianos en las afueras” del territorio.
El funcionario admitió la “superioridad numérica de las Fuerzas Armadas de Ucrania” en la zona. ”Estamos listos para cualquier decisión, incluso las más difíciles”, recalcó.
Según fuentes militares ucranianas, en la ciudad permanecen entre 60.000 y 70.000 residentes frente a los 320.000 de antes de la guerra.
