El expresidente estadounidense Donald Trump insistió en su plan de imponer la pena de muerte a narcotraficantes. Lo hizo al hablar en el America First Policy Institute, en Washington.
“Las sanciones deberían ser muy, muy severas. Si nos fijamos en los países de todo el mundo, los que no tienen un problema de drogas son los que instituyen una sentencia de pena de muerte de juicio muy rápida para los traficantes de drogas”, afirmó.
No es la primera vez que Trump propone la pena de muerte para traficantes de drogas. En 2018, cuando aún estaba al frente de la Casa Blanca, dijo que presentaría una iniciativa de este tipo contra los narcotraficantes “realmente malos” en un intento por combatir la epidemia de adicción a opiáceos que castiga a Estados Unidos. Pero el plan no prosperó.
Ahora, desde la oposición, volvió a insistir con el tema. “Suena horrible, ¿no? ¿Pero sabes qué? Esos son los que no tienen ningún problema. No se necesitan 15 años en la corte. Va rápido. Usted ejecuta a un traficante de drogas y salvará 500 vidas”, afirmó.
Donald Trump pidió tomar medidas más enérgicas contra el crimen
La nueva ofensiva de Trump se enmarcó en un pedido de medidas drásticas para luchar contra el crimen.
Así, pidió que haya patrullas de policía en cada esquina de las ciudades donde se han reportado casos de violencia como en Filadelfia y Washington.
Trump también sugirió trasladar los campamentos de personas sin hogar a “grandes parcelas de tierra barata en las afueras de la ciudad” y pidió una “campaña nacional sin restricciones para desmantelar las pandillas y el crimen callejero organizado en Estados Unidos”.
“Hay que ser duros, desagradables y malos si es necesario”, afirmó.
Además, alertó: “Vivimos en un país tan diferente por una razón principal: ya no hay respeto por la ley y ciertamente no hay orden. Nuestro país es ahora un pozo negro de delincuencia”, dijo.
El discurso de Trump se produjo días después que el comité de la Cámara de Representantes que investiga el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 celebrara una audiencia sobre la inacción del entonces presidente mientras sus partidarios irrumpían en el edificio legislativo.
